LILI

Todo se le fue mezclando en los dedos
no había vivido el calor del corazón
y sin lamentarse
sin pedirlo jamás,
se fue complicando en aquellos largos besos sin sabor;
miles de castillos teóricos.

Poco a poco se le fue ahuecando el alma
y como coraza pútrida
encharcada en manojos de negras ocas
ha ido moviendo, hasta hoy, los pliegos cansados de su cuerpo oscuro..